martes, 23 de agosto de 2016

Breve, por Gabriel Zas

Foto: Clarín
María Eugenia Vidal volvió a sufrir otra serie de amenazas

El ministro de Seguridad bonaerense, Gustavo Ferrari, reveló hoy que la Gobernadora María Eugenia Vidal sufrió otra serie de intimidaciones entre las 22 y las 23 de anoche, según consignó el diario Clarín. Y especificó que la más grave tuvo lugar en su antigua casa en Castelar, en donde le dejaron en el garage un cartucho de escopeta sin percutar. 

"Es un mensaje evidente", aseguró el ministro de Justicia bonaerense Gustavo Ferrari, que consideró: "No pueden dejar de vincularse todos estos hechos con la lucha contra la corrupción y contra las mafias", en alusión a los cambios en la Policía Bonaerense para lograr mayor transparencia en la fuerza. En declaraciones a un programa televisivo, señaló de todos modos que la advertencia "no se puede reducir a un único sector", según TN. 

El cartucho fue localizado por un guardia privado que ocupa una casilla de vigilancia en la esquina de la casa. Después avisó a la Policía provincial.Vidal se trasladó recientemente a la Base Aérea de Palomar, en el mismo distrito, por cuestiones de seguridad. Según Ferrari, el incidente se produjo durante unos minutos de ausencia de los guardias de seguridad de la vivienda, que fueron a cargar combustible a una estación adyacente al domicilio de la mandataria. Cuando regresaron, se encontraron con la sorpresa

Las intimadaciones hacia Vidal fueron en crecida durante los úitmos tres días. El último episodio registrado fue una llamada al número de emergencias 911, en donde se advertía que la Gobernadora iba a volar por los aires. Además, fue agredida por sindicalistas en una visita a Mar del Plata, junto al Presidente Mauricio Macri, quien por otra parte, recibió una amenaza de muerte también suscitada en la misma línea de emergencias, cuando el 17 de Agosto pasado viajó a Mendoza para rendirle homenaje al general San Martín. El agresor fue inmediatamente identificado y detenido por las autoridades locales, pero en todos los casos, la seguridad presidencial se reforzó más de lo que exige el protocolo.

Además, en junio pasado, dos custodios fueron encontrados en actitud sospechosa revisando la oficina de la Gobernación Provincial, en donde María Eugenia Vidal tiene instalado su despacho. Por ese hecho, ambos efectivos fueron separados de sus cargos. 

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